Este fin de semana nos hemos acercado a Potes, lugar tradicional de visita de los Martin-Urbieta, y que por casualidades de la vida ( o porque mi padre no tiene, tenía, costumbre de moverse hacia sitios donde haya verde o arena) yo no habia visto nunca.

Como lugar para sacar fotos no esta mal, aconsejo a quien le guste que se pegue un paseo por la Sierra de Cameros. Yo por mi parte no he disfrutado lo que Iker pensaba iba a ser un paseo...de 90 minutos sobre piedras y con un fresquete de aupa!!!. Al final se ha impuesto mi renuncio particular, si queremos monte vamos poco a poco....mucho mejor un paseo tranquilo por la Canilla, que me tengo que acostumbrar!!! Iker aun no sale de su asombro, pensaba que me iba a poder engañar para dar vueltas insulsas entre pedruscos...jie jie; he tardado 5 minutos en notar que me faltaba el aire; soy un floja!!!


En fin, el hotel La Barcena estaba bien pero nos tocaron unos vecinos muy ruidosos con un crio que no para de gritar Aitaaaaaaaaaaaaaaaaaa!!!, Amaaaaaaaaaaaaaaaaa!!! a lo que ellos respondian: Ya vale Nicolas!!!. Dedujimos de esto que eran vascos, concretamente de la margen derecha, y que si tuvieran una niña le pondrian Alejandra (se lleva mucho por esos lares).